Audi presentó su prototipo 100% de propulsión eléctrica. Tiene 313 CV, gracias a cuatro motores independientes situados detrás de cada rueda, con los que consigue acelerar de 0 a 100 km/h en 4,8 s. La autonomía es 248 km.
La entrega del PAR es inmediata y tiene una aceleración abismal La velocidad máxima está limitada a los 200 Km/h, para evitar el gasto innecesario de energía.
La batería se puede cargar a corriente 230v o 400v mediante cable, Audi trabaja con el objetivo de realizar la carga sin necesidad de usar ningun cable.
Se han empleado materiales muy ligeros para el conjunto no tenga un peso excesivo.
Solamente la batería pesa 470 kilos y el total del conjunto se sitúa en los 1600 kgs. 90 kgs menos que un Audi R8, se ha conseguido esta cifra, empleando metales ligeros, el chasis en casi su totalidad es de aluminio y para los interiores se han utilizado materiales sintéticos con refuerzos en fibra.
Su interior carece de interruptores ya que casi todo se maneja desde un dispositivo interactivo, al igual que en todos los prototipos de Audi.
La estética es muy parecida a la del Audi R8, y emplea la tecnología LED en faros, interiores, etc, además adapta sus luces según la lectura de sus sensores y emplea su sistema Car-to-X, que pondrá interactuar con el resto de coches, semáforos, estado vías, etc.
Algunas fotos del coche:
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